domingo, 27 de diciembre de 2015

Acerca del Necronomicón y su relación con Aleister Crowley, por Simon en "El Necronomicón, El Libro de la Ley de los Muertos"

"Nuestro trabajo es, por lo tanto, históricamente auténtico; el descubrimiento de la tradición sumeria".
Aleister Crowley...

Como se cree que sería la versión original del
Necronomicón.
          El NECRONOMICON según los cuentos de Lovecraft, era un volumen escrito en Damasco en el siglo VIII por una persona llamada "El árabe Loco", Abdhul Alhazred. Debió haber tenido aproximadamente unas ochocientas páginas, ya que hay una referencia en una de las historias relativa a una lacuna que aparece en la pagina setecientos y pico. Fue copiado e impreso en varias lenguas, cuenta la historia, entre ellas el latín, el griego y el inglés. Se supone que el doctor Dee, mago ilustre de la época de Isabel I, tenía una copia que él mismo tradujo. Según los mitos, el libro contiene fórmulas para invocar y hacer visibles cosas increíbles: seres y monstruos que residen en el Abismo y en el Espacio Exterior de la psique humana.
          Es cierto que existieron esos libros, y todavía existen. Idries Shah nos relata las historia de su búsqueda de un ejemplar del Libro del Poder, escrito por el mago árabe Abdul-Kadir, del cual se ha encontrado solo una copia (Véase La ciencia secreta de la magia, de Shah). Las llaves de Salomón tenían idéntica reputación, igual que El Mago, de Barret, hasta que todas estas obras fueron finalmente reimpresas durante los últimos quince años más o menos. Se decía que El Amanecer Dorado, una famosa sociedad ocultista británica y americana de principios de siglo, poseía un manuscrito titulado Los velos de la existencia negativa, escrito por otro árabe.
          Se trata evidentemente de manuales de hechiceros, no de libros de textos generalista ni de enciclopedias de magiak ceremonial. En otras palabras se supone que el hechicero o el mago están en posesión de un conocimiento y entrenamiento necesario para llevar a cabo toda complejidad del ritual mágico, exactamente igual que se espera que un cocinero sea capaz de batir huevos antes de conjurar unos huevos a la benedictina. Los grimorios o libros negros  eran sencillamente variaciones sobre el mismo tema, igual que los libros de cocina: relatos distintos de lo que han hecho anteriormente los otros magos, de los espíritus con los que han contactado y del éxito que han tenido en sus empresas. Se supone que los magos que lean actualmente esas obras  serán capaces de distinguir la paja del trigo, del mismo modo que un alquimista es capaz de descifrar los errores deliberados que figuran en un tratado sobre su disciplina.
          Por lo tanto era y es una locura para el neófito coger una de esas obras de magiak ceremonial, como La llave menor de Salomón, para practicar conjuros. Igual que sería una estupidez coger la magiak de Crowley en Teoría y práctica para el mismo propósito. Definitivamente ninguno de los dos es para principiantes, indicación que no se ha señalado suficientemente. Quizá, por desgracia, el terrible NECRONOMICÓN caiga también dentro de esta categoría.
Aiwass
          La magiak de Crowley es un testimonio de lo que encontró en sus investigaciones acerca de los mitos prohibidos y olvidados de las civilizaciones pasadas y de las épocas antiguas. Su Libro de la ley  fue escrito en El Cairo en la primavera de 1904, cuando se creíaen contacto con una inteligencia superior a la humana llamada Aiwass, que le dictó los tres capitulos que componen el libro. Ese libro influyó mucho más que ningún otro, de modo que se pasó el resto de la vida tratando de comprenderlo en profundidad y dar a conocer su mensaje al mundo. Además, el libro contiene las formulas necesarias para invocar lo invisible y hacerlo aparecer, y en sus propias paginas se esconden los secretos de las transformaciones; se trata, evidentemente del Necronomicón del propio Crowley, tomndo al dictado en Oriente Medio a la sombra de la Gran Pirámide de Guiza, y por lo tanto en él se conjura no solo la belleza, sino también a la Bestia que sigue aguardando a la humanidad.
          En vano trataríamos de hacer una sinopsis de la filosofía de Crowley; lo único que se puede decir es que su leitmotiv es el rebelaicisimo.
          -Haz tu voluntad, esa es toda la ley-
          Harían falta muchos volúmenes para explicar el sentido real de esa frase, pero en términos generales se refiere a la unidad de la conciencia del Sí mismo: un proceso de individuación que culmina con un rito llamado -Conocimiento y conversación con el Sagrado Ángel Guardián-; Ángel aquí significa el Sí mismo puro, desarrollado.
          No obstante, quedan muchos terrores que atravesar en el camino hacia uno mismo, e incluso un abismo que cruzar antes de proclamar victoria. Demonios, vampiros, sanguijuelas psíquicas, formas repugnantes acechan al aspirante a mago desde todos los ángulos, acosándolo desde cada cuarto de la circunferencia del círculo mágico:formas que deben ser destruidas para evitar que devoren al propio mago. Cuando Crowley anunció que había superado todos los obstáculos, que había cruzado el Abismo del Conocimiento y que se había encontrado con su verdadero Sí mismo , lo que de verdad había descubierto era que era idéntico a la Bestia del Apocalipsis, el 666, que el cristiano considera como el representante del demonio. En verdad Crowley no sentía sino admiración por el Shaitan (Satán) del asi llamado culto de la -Adoración del diablo- de los yazidíes de Mesopotamia. Porque vio que los yazidíes poseían un gran secreto y una gran tradición que se extendía muy atrás del tiempo, más allá del origen del culto al Sol de Osiris, Mitra y Cristo; antes incluso de la formación de la religión judía y de la lengua hebrea. Crowley se remontó a un tiempo anterior a la adoración de la Luna a una -Sombra Fuera del Tiempo- y al hacerlo, ya se diera cuenta o no, escuchó la -Llamada de Cthulhu- 



Este texto fue extraído directamente por
el Administrador de 'El soñar de los muertos' del libro
"Necronomicón. El libro de la Ley de los Muertos"
Gracias por leer. 


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